A caballo entre la Sierra de Guadarrama y la Sierra de Gredos

Viñedos y Bodegas en parajes espectaculares

Esta zona de Madrid, con DO Vinos de Madrid (subzona San Martín de Valdeiglesias), concentra un conjunto interesante de pequeñas bodegas que elaboran con mucho mimo un vino de calidad que poco a poco va consiguiendo su reconocimiento a nivel nacional. Es una gozada visitar sus viñedos plantados en paisajes espectaculares, conocer su forma particular de hacer caldos y sus historias.

A cada bodega su peculiaridad, pero hay alguna donde podéis disfrutar de sus vinos, de una buena conversación y de unas chuletillas al sarmiento con vistas a un bellísimo paraje...

Toros bravos en la dehesa

La estampa de los toros pastando y correteando por el campo de dehesa es uno de los grandes tesoros de nuestro patrimonio cultural y natural. La zona noroeste de Madrid cuenta con ganaderías que se dedican a criar el toro bravo. Los ganaderos saben que cada vez lo tienen más difícil, pero, a muchos, este oficio les viene de familia, le tienen querencia y continuan criando una raza que forma parte del patrimonio genético español y que mantiene vivo el bosque de dehesa.

Artesanía de excelencia

Por esta zona  hay varios maestros artesanos que con su exquisito saber hacer dan continuidad a oficios tradicionales. Entre ellos, una artista e investigadora de las plumas que continua el legado de los artesanos mexicanos que llevan creando auténticas maravillas con el plumaje desde la época prehispánica y colonial. También ceramistas contemporáneos que experimentan con el diseño y las texturas para crear piezas de autor que son bellezas. O un artesano de la construcción tradicional especializado en bóvedas y arcos de piedra y ladrillo, y que, entre sus encargos, presume de haber construido una cúpula para el arquitecto Norman Foster para la Bienal de Venecia.

Y todo esto aderezado con rutas guiadas de senderismo o a caballo por paisajes de cerros, pastos, bosques mediterráneo y de ribera, aromáticas, huertos, viñedos y olivos. Y todo ello a la vista del águila imperial ibérica, del águila real, del buitre negro, el búho real, el halcón peregrino, la cigüeña negra, la oropéndola, el mirlo acuático y el martín pescador.

Y un patrimonio histórico monumental que no deja indiferente, desde el Real Monasterio de El Escorial, Patrimonio de la Humanidad, al Monasterio Santa María La Real de Valdeiglesias, que supuso el origen de la cultura del vino en la zona, la majestuosa iglesia gótica de la Asunción, las románticas ruinas del Monasterio de San Jerónimo de Guisando, junto a los verracos de piedra de Guisando que custodian el cerro desde tiempos inmemorables, fortines de la Guerra Civil y la suerralista estampa de antenas gigantes desperdigadas por el monte desde donde se retransmitió la primera llegada del hombre a la luna el 16 de julio de 1969.

Entre campos de olivos, aromáticas y viñedos 

Productos gastronómicos

Un recorrido entre campos y pueblos para volver a casa con la cesta cargada de productos gastronómicos de primera. Una forma de hacer la compra desde los orígenes del producto. Estas tierras fértiles de La Alcarria madrileña y de Las Vegas también producen su propio vino con DO Vinos de Madrid (subzona San Martín de Arganda) y cuenta con la singularidad de conservar aún sus caldos en bodegas subterráneas con enormes tinajas, además de disfrutar de campos de olivos que dan la famosa aceituna de Campo Real o cuyas almazaras transforman la oliva en un delicioso aceite virgen extra, y también huertas y colmenas de rica miel y talleres donde se elabora artesanalmente un riquísimo queso de oveja. 

Paisajes y pueblos

Sus caminos y carreteras recorren paisajes bucólicos de páramos y arroyos, colinas agrestes y valles fértiles, insólitos cortados y lagunas que llevan a interesantísimos pueblos como Nuevo Baztán, modelo de ciudad industrial del s. XVIII, obra de su gran impulsor Juan de Goyeneche y del arquitecto José Benito Churriguera.  Muy cerca se puede visitar la Iglesia de San Martin Obispo en Valdilecha con unos frescos románico-mudéjares que remontan al s. XIII y el pueblo blanco de Olmeda de Las Fuentes, que parece fuera de lugar, tan encantador que allí llegó a asentare una comunidad de artistas y donde podremos visitar el taller de una artista francesa.  También Colmenar de Oreja, con la sorprendente Iglesia de Santa María la Mayor y sus conciertos de órgano y el Museo de Ulpiano Checa, el pintor madrileño del siglo XIX cuya firma llegó a ser la más cotizada del arte europeo entre los años 1890 y 1910 y cuyas carreras febriles de cuadrigas fue fuente de inspiración para las películas hollywoodienses como Ben-Hur, Espartaco, Quo Vadis. O el popular Chinchón con su anís, su preciosa plaza popular y su conjunto monumental. Y entre pueblo y pueblo preciosas carreteras comarcales.

Además cuenta con el Museo histórico de la Batalla del Jarama en Morata de Tajuña de donde son también las famosas palmeras de chocolate. Los frescos románico-mudéjares en Iglesia de San Martin Obispo en Valdilecha, el Risco de Las Cuevas, un curioso yacimiento Neolítico en Perales de Tajuña y, el Real Sitio de Aranjuez, Paisaje Cultural Patrimonio Mundial, donde iba la realeza a pasar días de relax en una villa de inspiración italiana y, al lado, el precioso Real Cortijo de San Isidro, proveedor de vino y aceite de La Casa Real durante casi 2 siglos, un rincón muy desconocido que impulsó Carlos III como modelo agrícola de explotación la época.

Artesanía de excelencia

Subiendo hacia Alcalá de Henares, en un minúsculo pueblo, se encuentra el taller de un gran maestro encuadernador cuyos libros están repartidos por grandes bibliotecas y casas de coleccionistas por el mundo. Fue el primer taller que fui a visitar, cuando la agencia era un proyecto incipiente, y recuerdo verle hipnotizada manejar las herramientas con el soniquete de la radio de fondo y la ventana dando al campo abierto. Salí de su taller embobada. Y ya en Alcalá de Henarés, además de su patrimonio histórico-cultural, un taller maravilloso dedicado al arte sacro y ceramistas contemporáneos que dan forma a bellísimas piezas de aires primitivos.